17 de septiembre de 2010

LA DESAPARICIÓN DEL UNIVERSO - Gary R. Renard Capítulo 5° - (Parte II)

El   PLAN   DEL   EGO

Gary: Espera un momento. Si los contenidos de mi mente, incluyendo mi propio odio y mi culpa, están simbólicamente a mi alrededor..... ¿Cómo puedo mirar dentro cuando estoy conectado a un cuerpo y a un cerebro que sólo pueden percibir hacia fuera?

Arten: ¡Exactamente! Así es como el ego te tiende la trampa. Todo lo que experimentas confirma la realidad de la ilusión, y luego lo juzgas haciéndolo real para ti, manteniendo todo el sistema intacto. La respuesta a la pregunta que acabas de plantear es la respuesta a la vida. El camino de salida es la alternativa del Espíritu Santo, la ley del perdón. Tienes que aprender a ganarle la partida al ego. El único modo de perdonar lo que esta dentro es perdonar lo que parece estar fuera. En las próximas dos visitas te explicaremos estas cosas, y será divertido, o al menos el resultado lo es. Queremos asegurarnos de que comprendes sin ningún género de duda que nunca podrás encontrar un camino de salida y experimentar tu propia inocencia y Divinidad hasta que aprendas a perdonar todo lo que ves a tu alrededor. Hasta entonces, el verdadero escape es imposible. Crees que la gente que quiere escapar del mundo es débil, en realidad, tienen la idea correcta. Simplemente no saben cómo llevarla a cabo adecuadamente.

¿Qué es todo lo que ves a tu alrededor sino una serie de cuadros e imágenes, una película de tu propio odio y culpabilidad? Sí, tienes una serie de experiencias positivas entremezcladas con otras que están destinadas a enmascarar las cosas, pero eso es sólo dualidad.

A este nivel, la dualidad que se percibe en el universo simplemente refleja la dualidad de tu mente dividida, representada por símbolos de oposición y contrapartes. De modo que tienes bien y mal, vida y muerte, caliente y frío, norte y sur, este y oeste, dentro y fuera, arriba y abajo, oscuridad y luz, izquierda y derecha, enfermedad y salud, riqueza y pobreza, yin y yang, amor y odio, húmedo y seco, masculino y femenino, duro y blando, cerca y lejos y otras mil polaridades y fuerzas duales que no tienen nada que ver con Dios, Quien es perfectamente total y completo, y nunca crearía nada que no lo fuera.

Todas las divisiones son meros símbolos de división y separación, y están diseñados para que sigas persiguiendo las cosas presuntamente buenas, de forma tal que nunca descubras que lo bueno y lo malo son igualmente falsos. Por eso tu atención se fija continuamente en los trucos del ego en lugar de la respuesta del Espíritu Santo.

El ego te ha engañado para que libres una batalla que ves continuamente fuera de ti, en donde el sistema de pensamiento del pecado, la culpabilidad y el miedo está proyectado de tal modo que se asegura de que siempre libres esa batalla donde no está la respuesta. La respuesta, el Espíritu Santo, permanece dentro de la mente dividida, junto con la mente del ego que está proyectando el universo. Tu trabajo ahora consiste en dejar de luchar esa batalla que no puedes ganar y dirigirte a la parte de tu mente que puede tomar decisiones, donde se halla el poder del Espíritu Santo.

Recuerda, el Espíritu Santo no está en el mundo. ¿Cómo podría estar en un mundo que no está allí? Él está en tu mente. Allí es donde están tanto la pregunta como la respuesta. Cambia al sistema de pensamiento del Espíritu Santo y no puedes perder.

Recuerda, no estamos hablando de ganar o perder en el mundo. El Curso no trata de eso, aunque sí te enseña cómo recibir verdadera guía a través de la inspiración, algo que hemos prometido examinar.

Ahora mismo, cuando las cosas van mal es cuando verdaderamente experimentas la culpa inconsciente. La experimentas como dolor físico, como sufrimiento psicológico o ambos. Esto hace que la separación parezca real para ti. Aquello que acertadamente has apodado el reino de la miseria es meramente tu propia culpabilidad inconsciente emergiendo a la superficie, haciéndote sufrir. Sin embargo, como ya hemos dicho, el Curso enseña que la mente que está libre de culpa no puede sufrir.

Lo que te queda por hacer entonces es dejar que el Espíritu Santo te enseñe sobre tu absoluta impecabilidad.

Evidentemente, si no fuera por el Espíritu Santo, tu situación no tendría remedio. Tu odio y culpabilidad quedarían atrapados para siempre en las profundidades de tu inconsciente. Por suerte para ti, el Espíritu Santo no es tonto, y el ego no es rival para Él.

Cuando te unes al perdón del Espíritu Santo el ego tampoco es rival para ti. En algún nivel el ego sabe esto, y siempre teme por su presunta existencia. Y tú también, pero sólo cuando te identificas con tu ego en lugar del Espíritu Santo. Al final, J se identificó completamente con el Espíritu Santo, y ahora es exactamente lo mismo que Él.

Gary: ¿Y vosotros también? Lo pregunto en nombre de mis futuros lectores.

Pursah: Sí, pero no hace falta que tus lectores crean en nosotros. Nuestras palabras pueden beneficiar a la gente tanto si creen en nosotros como si no. Lo importante es el mensaje del Espíritu Santo, no quienes parezcan transmitirlo. Si nosotros no creemos en nuestros propios cuerpos proyectados, ¿por qué habría de molestarnos que otros no creyeran?

Gary: ¿Será nuestro libro un éxito?

Pursah: No te preocupes por eso. Ocurra lo que ocurra, no le des mucha importancia. No es nada. Piensa de este modo. Si lo que el Curso dice es verdad---que cada individuo que viene al mundo es ilusorio porque de otro modo no pensaría que está aquí---entonces, si tienes un éxito de ventas, lo único que significa es que eres admirado por muchos trastornados.

Gary: Eso fue un chiste, ¿no es así?

Pursah: Sí, no te preocupes por las reacciones de la gente que se toma en serio ese tipo de chistes, quienesquiera que sean. No te pongas a la defensiva ni camines sobre cáscaras de huevo. Simplemente publícalo. Si no le gustas a alguien por causa del libro, perdónale.

Gary: Hubo un tiempo, en el pasado reciente, en el que hubiera usado otra palabra.

Pursah: Ahora tienes esta nueva palabra. Perdónales. Cuando nos vayamos esta vez vas a tener cinco meses para trabajar la idea de que < El amor no abriga resentimientos >. También debes seguir haciendo el resto del Libro de Ejercicios y leyendo el Texto, pero debes de incorporar la idea de <sin resentimientos > en las situaciones clave, siempre que te acuerdes. Cada persona tiene ciertas frases e ideas del Curso que son magníficas para recordarle la verdad. Ésta es una de las tuyas.

Gary: ¿Por qué vais a tardar tanto el volver, amigos?

Arten: Ya hemos subrayado que este trabajo no es algo que se haga de hoy para mañana. Después de esa próxima visita tardaremos 8 meses entre una visita y otra. Cuando dijimos que tardaríamos varios años en completar todas nuestras visitas, nos referíamos a un total de 9 años, y las últimas visitas serán anuales.

Gary: ¡Nueve años! ¿Qué pasa conmigo, estoy en el grupo de los lentos?

Arten: No, pero éste es un camino serio que, si sigues estando interesado, dura toda la vida. Tu auténtica transformación está a punto de empezar. Trabájala y no te preocupes por el tiempo, que no es nada. Tu mente no tiene edad porque el tiempo no es real. Y cuando experimentes los resultados, disfrútalos. Y no sólo los resultados son divertidos, la práctica del perdón también es suficientemente interesante como para ser divertida la mayor parte del tiempo...aunque no siempre quieras hacerla.

Como ya hemos dicho, no olvides que el Curso enseña que tú no tienes que cambiar la mente de nadie y no tienes que cambiar el mundo. Lo único que tienes que hacer es cambiar tu manera de pensar respecto al mundo. Por ejemplo, no te preocupes por la paz mundial. La mejor manera de ayudar a conseguir la paz mundial es practicar tú mismo el perdón y compartir tu experiencia con la gente. Cuando la gente del mundo busque la verdadera paz interior comprendiendo y aplicando correctamente la ley del perdón, la aparente paz externa será la consecuencia natural de la paz interior. Pero ése no es el enfoque del Curso de J. Su enfoque consiste en cambiar tu manera de pensar respecto al sueño.

Gary: Hablando de sueños, antes de empezar a practicar el Curso nunca había tenido pesadillas, pero últimamente he tenido algunas muy raras....imágenes que deberían haber sido imágenes terroríficas. Por alguna razón no tengo miedo cuando veo estas cosas, y no tengo miedo cuando despierto. Es como si esas terribles imágenes de asesinatos, vergüenza y figuras infernales me fueran mostradas deliberadamente.

Arten: Sí. Como analogía, ¿has visto algunos de esos cuadros religiosos medievales que sugieren el aspecto que debe tener el infierno?

Gary: Sí. Algunos de ellos son muy gráficos.

Arten: Sí, muchos son terroríficos. Aunque la experiencia no es igual para todos, lo que ocurre en esos cuadros y en tus sueños es que tu culpabilidad inconsciente está saliendo a la superficie, te está siendo mostrada, y en tu caso liberada. En el ejemplo de los artistas, su miedo está simbolizado en los cuadros. En el ejemplo de los sueños, tu miedo, culpabilidad y odio---que han dejado de ser inconscientes---están siendo expresados en imágenes. Como estás practicando el perdón al aplicar las lecciones del Libro de Ejercicios, este viejo sistema de pensamiento está siendo perdonado y liberado por el Espíritu Santo. Por eso no les tienes miedo, aunque tengan un aspecto horrible. J está allí, mirándolas contigo. Tu mente recta sabe que Él está allí. Hay una parte de ti que sabe que sólo es un sueño y que no hay nada que temer.

Así es como será tu vida de vigilia algún día, cuando todos tus pecados secretos y odios ocultos hayan sido perdonados.

Veas lo que veas, independientemente de lo que parezca ocurrirte a ti o a cualquier persona de tu alrededor, sabrás que no hay nada que tener. Los detalles de estas imágenes son diferentes para cada individuo, pero, como bien sabes, las imágenes de lo que la gente llama su vida de vigilia a veces también pueden ser infernales. En cualquier caso, todo es un símbolo del sistema de pensamiento del ego basado en el miedo, la culpa y la muerte, y no es real. ¿Por qué temerlo? Todas las imágenes no son más que imágenes, independientemente de cuando o cómo parezcan ocurrir.

Pursah: Estas imágenes que has visto en algunas de tus pesadillas son características de la naturaleza del pensamiento del ego a nivel de tu inconsciente. Ves, el inconsciente es mucho más horrible que lo que está en la superficie. Así es como el ego se oculta a si mismo y a su plan. La proyección consciente que ves a tu alrededor es todo un nivel alejado de la mente inconsciente. De modo que, si bien a veces el universo visible pueda ser horrible y atemorizante, no es nada en comparación con el horrible sistema de pensamiento del que emana.

De hecho, como la proyección que ves es una defensa, podrías decir que el universo existe porque es tolerable para ti en comparación con lo que hay en tu mente inconsciente. Es posible que el mundo no siempre sea tolerable para todos---ya que a menudo se producen asesinatos y suicidios---pero no es más que un paseo por el parque en comparación con la porquería profunda y horrenda que está debajo. A estas alturas ya has visto parte de tu culpa simbolizada de distintas maneras. ¿Qué aspecto dirías que tiene?

Gary: Oh, las palabras que vienen a la mente son fea, monstruosa, demoníaca, salvaje, fantasmagórica y atormentada.

Arten: Ahí estás. Acabas de dar una buena descripción de cómo es el inconsciente para todos, aunque los demás no lo saben, y de cómo seguirá siendo hasta que sea liberado al Espíritu Santo.

Es tan terrible por lo que representa: nada menos que la separación de Dios y un ataque contra Él, y la pena de muerte para Su Hijo quien cree haber cometido un crimen, y cuya terrible culpabilidad exige que sufra. Ciertamente, el mundo que ves puede ser desagradable por momentos, pero en realidad es un escape de otra suerte aparentemente peor; la culpabilidad oculta en tu propia mente, de la que no sabes nada.

Gary: El mundo no es buena escapatoria para las personas que matan a otras o a sí mismas. ¿No hace eso que se sientan aún más culpables?

Arten: No. Recuerda que la culpa sólo es un pensamiento en la mente, y una acción en el mundo no puede crear una consecuencia real. Actos como el asesinato y el suicidio reciclan la culpa que todos creen inconscientemente que es real, y la mantienen en marcha. Las personas que se matan a sí mismas o a otras en la muerte como una escapatoria. Los que asesinan en realidad se odian a sí mismos, y aunque hayan proyectado ese odio sobre los demás; matan en un intento retorcido de destruirse a sí mismos. Como hemos dicho tu odio en realidad es autoodio. Cada criminal tiene la esperanza secreta de ser atrapado y castigado. Recuerda, aunque gran parte de la culpa se proyecta sobre los demás, también se proyecta sobre tu propio cuerpo ilusorio que, como ya hemos dicho, tu mente proyecta fuera de ella.

Existen muchas otras variantes, como la estrategia de suicidarse a manos de la policía, en la que la gente abre fuego contra la policía porque sabe que probablemente acabará muriendo. Los que se suicidan, de la manera que sea, tratando de por fin al insoportable dolor psicológico de su culpa y sufrimiento.

Como su culpabilidad inconsciente permanece intacta, simplemente acaban reencarnando y el problema sigue sin resolverse. La muerte no es un camino de salida. El camino de salida es el verdadero perdón. Como enseña el Curso:

Al mundo no se le abandona mediante la muerte sino mediante la verdad, y la verdad sólo la pueden conocer aquellos para quienes el Reino fue creado, y por quienes espera.

Pursah: No sólo tienes esta tremenda resistencia a afrontar lo que eres que es tu horrible culpa bajo la superficie sino que, al mismo tiempo, tu ego está aterrorizado porque, si lo haces con éxito y cambias tu manera de pensar, perderá su identidad como individuo separado. Vas a necesitar cierta fuerza de voluntad para admitir que este sistema de pensamiento está dentro de ti mientras lo observas en acción; para después permitir que el Espíritu Santo lo deshaga perdonando sus imágenes simbólicas que ves fuera de ti.

Gary: ¿Y vosotros me vais a decir cómo?  El Libro de Ejercicios evidentemente lo hace, pero, ¿me vais a brindar más ayuda?

Arten: Todo lo que te brindaremos se encuentra en el Curso. Simplemente iremos tomando cosas de todos los libros y reuniéndolas de un modo que te ayude a aplicarlas más eficazmente por ti mismo. Dijimos que no te daríamos sólo teorías, sino un modo de afrontar lo que tienes delante.

Gary: Bien, eso espero, porque a veces pienso que tendría que ser un santo de porquería para hacer todo eso. Quiero decir que.....¿nunca debo abrigar ningún resentimiento contra nadie? 

¿Nunca debo juzgar, condenar ni atacar?  ¿Nunca debo tener un mal pensamiento sin tomar conciencia de él y perdonarlo?  ¿Y nunca debo creer que mi ira está justificada?  Amigo, eso es imposible.

Arten: Tú eres un santo, Gary; lo que pasa es que aún no lo sabes. En cuanto a que hacer el Curso es imposible, te equivocas. Como tú mismo has dicho, el Curso dice que los milagros son hábitos. Cada vez experimentarás más y más que el Curso tiene razón cuando dice:

La ira nunca está justificada. El ataque no tiene fundamento. Con esto comienza uno a escapar del miedo, y con esto también es como lo logrará.

¿Por qué son importantes estas cosas? Porque, tal como enseña el Curso, tanto si atacas a otros con tus pensamientos como si alguien parece atacarte verbal o físicamente:

El secreto de la salvación no es sino éste; que eres tú el que se está haciendo todo esto a sí mismo. No importa cual sea la forma del ataque, eso sigue siendo verdad.

No importa quién desempeñe el papel de enemigo o quién el de agresor, eso sigue siendo verdad. No importa cuál parezca ser la causa de cualquier dolor o sufrimiento que sientas, eso sigue siendo verdad.

Pues no reaccionarías en absoluto ante las figuras de un sueño si supieses que eres tú el que lo está soñando. No importa cuán odiosas y cuán depravadas sean, no podrían tener efecto sobre ti a no ser que no te dieses cuenta de que se trata tan sólo de tu propio sueño.

Cuando juzgas a las figuras del sueño, haciéndolo así real, caes en la trampa del ego, tanto si crees que debes expiar tu pecado como  si crees que otros deben expiar sus pecados o que merecen tu condenación.

No puedes desvanecer la culpabilidad otorgándole primero realidad, y luego expiando por ella. Ése es el plan que el ego propone en lugar de simplemente desvanecerla. El ego cree en la expiación por medio del ataque, al estar completamente comprometido  con la noción demente de que el ataque es la salvación.

Como continúa diciendo el Curso:

De acuerdo con las enseñanzas del ego, por lo tanto, es imposible escaparse de la culpabilidad. Pues el ataque le confiere realidad, y si la culpabilidad es real, no hay manera de superarla.

Gary: De modo que Dios no tiene que perdonarme, yo tengo que perdonarme a mi mismo perdonando a los demás en lugar de atacarlos. Incluso si sólo es un juicio mental y no digo ni hago nada, un pensamiento de ataque sigue siendo un pensamiento de ataque. Por eso tengo que escudriñar mis pensamientos. Tanto si ataco como si perdono, lo estoy haciendo para mi mismo porque, de todos modos, esas personas no son reales, son sólo símbolos de lo que está en mi mente, del mismo modo que yo soy un símbolo en la mente colectiva. El mundo no necesita el perdón de Dios; las personas tienen que perdonarse a sí mismas perdonando las imágenes que ven.

Arten: Sí. Absolutamente. El Curso no podría ser más claro a ese respecto:

Dios no perdona porque nunca ha condenado. Y primero tiene que haber condenación para que el perdón sea necesario. El perdón  es la mayor necesidad de este mundo, y esto se debe a que es un mundo de ilusiones. Aquellos que perdonan se liberan a si mismos de las ilusiones, mientras que los que se niegan a hacerlo se atan a ellas. De la misma manera en que sólo te condenas a ti mismo, de igual modo, sólo te perdonas a ti mismo.

Pero si bien Dios no perdona, Su Amor es, no obstante, la base del perdón.

Aunque no necesitas el perdón de Dios, porque Él nunca te ha condenado, tienes acceso a Su Voz, el Espíritu Santo, y esto es lo que Él hace con la culpa:

El Espíritu Santo sencillamente la desvanece mediante el sereno reconocimiento de que nunca ha existido.

Hablaremos más sobre esto en nuestras próximas visitas.

Pursah: Quizás aún no comprendas completamente que eres tú quien obtiene beneficio del verdadero perdón. No siempre tienes que perdonar de inmediato, y tampoco lo harás. De vez en cuando tendrás que perdonar algo ocurrido hace media hora, o hace dos días.

Así es como funciona. Nadie es perfecto, y ahora mismo hay una epidemia de ira que asola el mundo, haciendo que sea aún más difícil no responder a ella. Incluso hace dos mil años, algunas veces J se sentía tentado de identificarse con el cuerpo, pero, como era un Maestro, perdonaba y lo superaba muy rápidamente.

Sin embargo en tu caso, dado que el tiempo no es real---y como la memoria es una forma de percepción como cualquier otra---puedes perdonar un suceso del pasado en cualquier momento, incluso si la persona asociada con tu perdón ya no parece estar viviendo en un cuerpo.

Gary: ¿Cualquier cosa que me pueda quedar pendiente con mis padres puede ser perdonada?  ¿Incluyendo perdonarme a mi mismo por algo que pueda haberles dicho o hecho en el pasado?

Pursah: Por supuesto. Debes perdonarte a ti mismo tal como debes perdonar a otros, o de lo contrario no estás entendiendo el realidad la insignificancia del cuerpo. Como hemos dicho, tu cuerpo no es ni más real ni más importante que cualquier otro cuerpo.

Hablando del cuerpo, deberíamos resaltar algo sobre el tema de la reencarnación. Hablamos de ello como si ocurriera realmente. Tal como todo lo demás, sólo es un sueño. Sí, parece que encarnas en un cuerpo, y tienes la experiencia de vivir en un cuerpo, pero, como nos gusta señalar, el Curso dice que lo que estás viendo no es verdad. Y tú, querido hermano, estás familiarizado con el concepto de que tu experiencia es un sueño.

Nota: Cuando Arten mencionó por primera vez que el universo es un sueño, me rehusé a esa idea porque era contraria a mi experiencia. Sin embargo, tanto Arten como Pursah sabían que yo había leído el libro de Shirley Mc Laine Out on a Limb, libro que me había abierto los ojos en los años 80, y una de sus citas más interesantes procedía de las Cartas de León Tolstoi.

Era una pregunta retórica que me sonaba cierta, y aunque en aquel momento no me di cuenta, podría haber sido propuesta igualmente por un gnóstico valentiniano. <Toda nuestra vida, del nacimiento a la muerte, con todos sus sueños, ¿no es a su vez un sueño que tomamos como la vida real, de cuya realidad no dudamos únicamente porque no sabemos de la otra vida más real?

Gary: No es que la idea sea completamente extraña, es que a menudo no se siente como un sueño, aunque he tenido ese tipo de experiencias.

Arten: Sí, y tendrás más de ellas, y debes remitirte al perdón si quieres que esas experiencias sean más la norma en lugar de un suceso ocasional.

Gary: Para entender mejor qué es lo que debo buscar, ¿podrías explicarme algo más de cómo el plan del ego se muestra en el mundo?. Indicaste que todo es un montaje, ¿no es así?

Arten: Sí. El ego cree en la separación de Dios, y la aparente separación que aquí es constantemente representada resulta, como mínimo, algo muy molesto para ti. Cuando las cosas parecen ir bien, experimentarás miles de veces en tu vida que, de repente, sucede algo que te enoja. Puede ser algo que consideras grande o pequeño.

No importa. Si altera aunque sea mínimamente tu paz interior, es un símbolo de la separación. Cuando esto sucede, en todas sus diferentes formas, siempre es una manera de revivir aquella primera ocasión en que eras perfectamente feliz en el Cielo y de repente te sentiste muy enojado, siendo ésa la primera vez que pensaste que estabas separado de Dios.

Todos los enojos que suceden en el mundo están basados en esta idea. En tu vida de sueños habitual, las causas del enojo parecen ocurrirle específicamente a la específica identidad que posees como cuerpo, que en sí misma es una falsa idea de separación.

Gary: Es como dijo el Poeta:<Somos símbolos, y habitamos símbolos>.

Arten: Bueno, sí. Creo que eso es de Essays: Second Series (1844) El Poeta. Sabes que eres muy sofisticado teniendo en cuenta tu inmadurez.

Gary: Gracias. Lo pondré en mi currículo.

Arten: Durante nuestra próxima visita aprenderás de manera más precisa que, tal como enseña el Curso, sólo hay un problema y una sola solución, es decir, el Espíritu Santo. En cuanto al plan del ego, vuestros aparentes y múltiples problemas surgen en este mundo como un intento de haceros reaccionar: de que os sintáis mal, de que os sintáis culpables, o locos, o derrotados, o aburridos, o atemorizados, o inferiores, o avergonzados, o enfadados, o solitarios, o superiores y condescendientes. Todo esto denota algún tipo de juicio, independientemente de la forma. En cuanto fabricas ese juicio, das validez al mundo del ego y refuerzas la aparente realidad de la separación y todo lo que va con ella.

Dentro del guión del ego, que incluye la totalidad del tiempo---un tema del que hablaremos más adelante---el ego ha incluido todas las posibles variantes de la separación, de forma tal que el conflicto perpetuo esté asegurado. Eso se encuentra entrelazado con tus buenos momentos para hacer que parezcan más reales, aunque  esta combinación sólo es otro ejemplo de la dualidad.

Aquello que verdaderamente eres---espíritu---no puede ser dividido, y ahora te entregaremos algunos ejemplos más de cómo el ego intenta atraerte hacia la creencia en la división.

Pursah: Es por tus respuestas y reacciones a lo que ves, como haces que la experiencia de separación de Dios parezca real. Los detalles a los que das realidad se presentan tanto en tus relaciones como en los conflictos incluidos en tu guión. No siempre se trata de cosas que parecen sucederte a ti. Puede tratarse de sucesos que observas como espectador, en las relaciones con los demás, o incluso en las noticias que ves o lees en Internet.

Por ejemplo, cuando mueren pasajeros en un accidente aéreo, ¿qué podría ser más simbólico de la caída del hombre? Cuando un bebé, abandona el paraíso del vientre de su madre y sale al mundo, ¿qué otra cosa podría simbolizar excepto la separación de Dios? Cuando una bala, cuchillo, rayo láser, flecha, lanza o corona de espinas atraviesa la piel de alguien, ¿qué le pasa a la piel?

Gary: Se separa.

Pursah: Durante un terremoto, ¿qué le ocurre al suelo donde has construido los cimientos de tu vida ilusoria?

Gary: Se separa.

Pursah: Si un bebé o un niño es abandonado, eso evidentemente es separación, sin dejar de mencionar que el niño tiene a partir de ese momento, una excelente oportunidad de culpar a los padres biológicos que le abandonaron, y así proyectar la culpa inconsciente sobre ellos y preservar su ego-itis. Los ejemplos son infinitos, pero, una vez más.......

Gary: En realidad todos son lo mismo.

Pursah: En enfermedades como el cáncer y en muchas otras dolencias, las células corporales atacándose unas a otras son símbolos de los pensamientos de ataque en la mente---que a menudo son inconscientes.

En cada una de las etapas de tu vida: tu infancia y educación escolar, en todas las actividades con las que te comprometes durante décadas y en las diferentes profesiones que representan sus propias variantes de falsedades maquiavélicas, se producen conflictos que simbolizan la división. Si tienes suerte, tu país no entrará en guerra, el más especial de los conflictos, pero no puedes contar con ello. Y eso por no hablar de las incontables oportunidades de violencia que se presentan desde la cuna hasta la tumba, aunque estés viviendo en los irónicamente llamados tiempos de paz.

Aparte de estas relaciones de odio especial, que también se manifiestan en el  simple hecho de no aprobar a alguien, existen además las relaciones de amor especial. ¿Y cómo serían posibles sin el cuerpo? Ya hemos citado la enseñanza del Curso al explicar que le cuerpo es el pensamiento de pecado hecho carne y después proyectado hacia fuera ¡produciendo lo que parece ser un muro de carne entorno a la mente que la aprisiona!  ¿Es éste el tipo de amor que tendrías? Por su parte, el amor del Espíritu Santo expresa que los cuerpos no pueden mantenerte separado.

Reúnete contigo mismo a través del perdón, de modo que tú, tus hermanos y hermanas podáis ser uno e ilimitados. Si después de eso eliges unirte con otros cuerpos en el nivel de la forma, simplemente estarás haciendo lo que se supone que has de hacer, las mismas cosas que harías de todos modos. Ahora las están haciendo con el perdón, y el Espíritu Santo está contigo.

Gary, en tus relaciones personales, ¿qué ocurre simbólicamente cuando terminas una relación con alguien?

Gary: Te separas. Está bien, te entiendo. No es contradictorio decir que no hay nadie ahí fuera y después dar un giro y decir que el único modo de regresar a casa es perdonar lo que hay ahí fuera, porque sólo estás perdonando lo que parece estar ahí fuera, ya que es un símbolo de lo que tienes en tu mente.

Pursah: Sí, ya entraremos más en cómo hacerlo. Asimismo, tal como hemos dicho antes, nuestras visitas se harán más cortas. Una de las razones es que la respuesta del Espíritu Santo es mucho menos complicada que los aparentes múltiples problemas del ego. De hecho, una de las razones por las que Un Curso de Milagros es tan largo es que, aunque la verdad puede ser simple y coherente, tu ego no lo es, y tiene que ser des-hecho gradualmente.

Gary: Puedo entender eso, pero me pregunto cómo este guión nuestro, aparentemente enorme, pasa de ser una idea invisible a ser una manifestación visible. Quiero decir que, si todo está planeado con antelación, ¿cómo ocurre todo lo que tiene que ocurrir en el universo de esa manera tan precisa, como un reloj?

Pursah: Has planteado una pregunta complicada, pero es interesante que hayas usado las palabras (como un reloj). El universo se parece mucho a un gran reloj, al que le han dado cuerda o, mejor aún, a un juguete al que le han dado cuerda. Utilicemos tu sistema solar como microcosmos, recurriendo a una de las llamadas fuerzas naturales como ejemplo. Esto no explica todo el cuadro, pero te dará una impresión de las ingeniosas formas de la ilusión del ego.

Aunque la energía, a la que denominaré chi, es una ilusión, forma parte del mecanismo por el cual el ego toma el guión que está en la mente y lo transmuta desde el pensamiento invisible hacia formas invisibles pero mensurables, para luego transmutarlas en las manifestaciones visibles que ves y experimentas. En realidad todo este proceso ocurre de una vez, pero es necesario presentarlo linealmente para que puedas entenderlo.

Por ejemplo, digamos que pudieras observar tu planeta desde el espacio, desde la mitad de la distancia hasta la luna, y que pudieras ver el chi. Entonces verías que la tierra está completamente rodeada de chi electromagnético que llega hasta ella y más allá, bajo la forma de un enorme flujo de radiación procedente del sol. Este flujo del chi cambia constantemente, con el yin y el yang entrando en equilibrio para salir después, produciéndose asimismo nuevos equilibrios en todos los puntos intermedios. Los cambios del chi están causados, a su vez, por los cambios constantes en la irradiación solar.

Ahora bien, si pudieras mirar al Sol desde el espacio pero mucho más cerca, verías lo que puede describirse como enormes océanos giratorios de gas. Pocos se dan cuenta de que estos océanos de gas de comportan de manera similar a los océanos de la tierra.

Tal como las mareas de latiera están sujetas a los movimientos del la Luna, las mareas de estos océanos solares de gas están sujetas a las fuerzas de atracción y repulsión producto de la interacción de todos los planetas de nuestro sistema solar, e incluso del universo más allá, ya que, por supuesto, todo está interconectado.

Esto causa distintas mareas gaseosas, manchas en el Sol y otros eventos solares, los cuales a su vez regulan los cambios en el flujo de radiación que viaja a la Tierra como partículas tanto en el viento solar, como en la luz del Sol.

Este flujo de radiación variable, regulado por los movimientos que se producen dentro de todo el sistema solar, incluyendo la Tierra y su luna, causa los correspondientes cambios en el chi que rodea tu planeta, enviando campos electromagnéticos a cada centímetro de él. Tú no puedes ver esos campos de chi con los ojos del cuerpo, pero están por todas partes, y has estado atravesándolos al caminar cada día de tu vida.

Ellos regulan todo lo que te rodea, incluyendo tus decisiones y los movimientos resultantes. En realidad son pensamientos de un nivel completamente diferente, transmutado en forma de chi, que te indican qué pensar en este nivel. Todo lo que haces es consecuencia de lo que piensas, y a veces la acción sigue al pensamiento instantáneamente, como un reflejo. Esto es cierto para cada objeto animado y aparentemente inanimado que percibes.

Por ejemplo, ¿cómo crees que un ave tan pequeña como una golondrina puede estar volando en Sudamérica y de repente saber que tiene que emprender un vuelo de miles de kms de distancia hasta llegar a California siempre durante la misma época del año?

Gary: Algunos dirán que el causante es Dios, y otros usarán palabras como instinto o naturaleza, pero, ¿estás diciendo que el pájaro es dirigido por control remoto?

Pursah: En cierto sentido, si. Y tú también, aunque recordando en todo momento que la palabra remoto es un término relativo, y que en realidad estamos hablando de decisiones que vienen de un nivel de la mente completamente diferente, que es no-espacial. Tu experiencia te dice que tú tomas tus decisiones aquí, pero eso no es cierto. No es el cerebro humano el que toma las decisiones, como tampoco las toma el pequeño cerebro del pájaro. Cuando indicamos que eres muy parecido a un robot, no estábamos bromeando.

Pero el programador no es otra persona. No hay nadie más. Estamos hablando de auto pre-determinación. A este nivel de la realidad, tu suerte quedó sellada por el trato que hiciste con el ego, no con Dios, que no hace tratos. Toda tu mente-ego es el programador que envía señales a tu cerebro. Tu cerebro sólo es el componente físico del computador. Reenvía las señales al cuerpo, o unidad informática, diciéndole qué hacer, ver y sentir.

Tu experiencia es que estás aquí, en la pantalla del computador, separado de Dios, separado de tus hermanos y hermanas, y representando el pensamiento de separación y el conflicto que lo acompaña en la dualidad de tu mente dividida. Tus hermanos y hermanas están haciendo exactamente lo que quieres que hagan. Ya hemos mencionado la enseñanza del Curso en que se dice que no te das cuenta de que estás haciendo que actúen para ti.

Los cambios en los campos electromagnéticos regulan hasta tu forma de ver las cosas. Decir que algo es visible para ti sólo significa que está situado en la región del espectro electromagnético que es perceptible para la visión humana.

Gary: ¿Eh?

Pursah: Lo importante es que en realidad tú no tomas las decisiones aquí. Las decisiones se tomaron a otro nivel completamente diferente cuando aceptaste el plan del ego, y el único modo de salir de este complicado problema es regresar a tu mente correcta y elegir la interpretación que te brinda la alternativa del Espíritu Santo en lugar de la interpretación de tu ego, interpretación que te mantiene atrapado en el guión. Podría ser de ayuda si tratas de recordar que todo el asunto no es más que una grabación que has puesto en marcha. Por ejemplo, ¿cómo se almacena la información en los computadores, incluso en los disquetes?

Gary: ¿En bandas electromagnéticas?

Pursah: Sí, una cosa muy versátil. Como dijimos durante nuestra primera visita, los inventos en este nivel suelen imitar algún aspecto del funcionamiento de la mente. Puede que pienses que aquí tienes libre albedrío y que puedes determinar lo que te va a ocurrir, pero lo cierto es que todo ha ocurrido ya. Simplemente has puesto la cinta y estás mirándola y oyéndola, pensando que todo es real, un resultado de tu propia volición o de la casualidad a este nivel, en lugar de algo determinado a otro nivel.

Gary: Entonces, ¿para qué molestarme en hacer algo?

Pursah: Por dos razones. En primer lugar, aunque es un sistema cerrado, existen distintos escenarios abiertos para ti en cada ciclo de vida. Tomar dentro del sueño una opción que no involucre al Espíritu Santo no va a deshacer tu culpa inconsciente ni te sacará del sistema, pero puede producir una experiencia temporalmente diferente. Es como un guión con múltiples opciones, en el que, si tomas una decisión diferente, se abrirá un escenario diferente. Si tomas una decisión, tienes a la chica y la pasas bien, pero si tomas otra decisión, lo hechas todo a perder y acabas con depresión.

Incluso es posible volver a vivir la misma vida con un conjunto de resultados terrenales diferentes. Una vez más, nada de esto te conducirá realmente al lugar donde quieres estar. Simplemente te mantendrá atascado aquí, intentando alcanzar una felicidad temporal.

La otra razón, razón mucho más importante por la que deberías comprometerte en tu toma de decisiones, es la de regresar a la mente correcta y elegir al Espíritu Santo en lugar del ego, que sí te llevará donde quieres ir. El perdón tiene ventajas adicionales en el sueño, algunas de las cuales no siempre son evidentes para ti. Por ejemplo, digamos que un hombre mata a su esposa, o que una mujer mata a su marido. Uno de ellos está muerto, y el otro pasa el resto de su vida en prisión o es ejecutado. Pero, ¿qué pasa si hubieran aprendido a perdonar y no hubiera habido ningún asesinato?  ¿Cambiaría eso las cosas a este nivel?

Gary: Lo cambiaría todo, y probablemente la gente ni siquiera se daría cuenta de ello.

Pursah: Sí. Éste es un ejemplo extremo, pero hay miles de escenarios en los que, incluso en el nivel de la forma, el perdón produce resultados; y a menudo no te das cuenta de que estás mucho mejor de lo que hubieras estado de no haber perdonado. Éste es el por qué debes desarrollar la confianza en el Espíritu Santo. Él sabe lo que realmente es mejor para ti. De modo que no creas que no es importante encargarte de tu propia mente en este nivel. De hecho, es para eso el entrenamiento del Curso. El control de tu mente puede incluso proporcionarte el poder para suspender el dolor corporal, pero ya ahondaremos en eso más adelante.

Gary: Sabes, el otro día iba conduciendo, y tenía un tipo justo pegado a mi cola. Prácticamente estaba tocando mi parachoques. Eso me molesta mucho. No me gusta acelerar porque en este vecindario hay niños jugando en la calle. Estaba a punto de mandar al gusano a freír churros cuando pensé en el Curso.

De modo que no hice nada, él giró a la izquierda unas cuadras después y así acabó la cosa. Después pensé: ¿Qué hubiera pasado si le llego a insultar y él hubiera tenido un arma? Podríamos haber tenido un caso de ira en la carretera y yo podría estar muerto.

Arten: Sí. Recuerda que tu hermano que estaba en ese coche es un símbolo de lo que está en tu mente, incluyendo la impaciencia que exhibes en otras áreas de tu vida, simbolizada por su impaciencia. Sabes tan bien como nosotros que a estas alturas posiblemente serías rico si tuvieras más paciencia en tus tratos comerciales. Tú y tu hermano sois impacientes porque habéis hecho que la separación sea real, y piensas que tienes que esforzarte por llegar a alguna parte para poder vencer a Dios y probar que tienes razón.

De modo que viste tus faltas y tu culpa en tu hermano en lugar de verlas en ti. Por suerte para ti, en este caso concreto, tomaste la decisión correcta: tanto en el nivel de la mente como en el de la forma. No puedes equivocarte saliendo de la situación en paz, a menos que tengas que defenderte de un ataque corporal y de la posibilidad de muerte, en cuyo caso tienes permiso para usar los puños o, mejor aún, para buscar un camino de salida.

Gary: Aún así, creo que no debería haber pensado que el tipo era un gusano.

Arten: Eso es correcto, su gusantidad. Como J te explica en el Curso: < Tal como lo consideres a él, así te considerarás a ti mismo>

Gary: Entiendo. Oh, antes de que me olvide, lo que dijiste sobre el sistema solar y el chi explicaría por qué la astrología funciona de vez en cuando.

Pursah: Sí, pero la astrología no es precisa, y lo que estamos describiendo siempre es preciso, porque se corresponde exactamente con causa y efecto a nivel del universo conforme al guión del ego. Es cierto que la astrología, la numerología y muchas otras cosas ocasionalmente se correlacionan con el guión, pero aciertan o fallan, porque una parte del guión es que el mismísimo guión nunca será completamente previsible; ya que de otro modo no habría lugar para la suerte. El factor suerte ayuda a mantener el impacto, caos y temor inevitables que siempre emergerán en el guión.

Gary: Es una característica incorporada al sistema.

Pursah: Sí. La naturaleza caótica del ego también asegura que nunca habrá una teoría unificada del universo que se mantenga en el tiempo, porque en realidad el universo no está basado en el pensamiento de unidad;  está basado en el pensamiento de separación y división.

Continuará…

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