1 de octubre de 2008

MANIFIESTO DE LIBERTAD


1º de octubre, 2008, 7:55 am.
Después de cincuenta y nueve años de cautiverio de mi espíritu he tenido la bendición de llegar a conocer la libertad, de poder dejar volar mi espíritu, cuyas alas al principio eran muy débiles, como las de un pichón recién nacido, pero andando el tiempo se han ido fortaleciendo más y más, para remontarse a alturas para mí inesperadas.
He gozado de la libertad de ir mi espíritu, mucho más allá de las restricciones de la tercera dimensión. He sido bendecida en haberme despertado a ello.


Ahora estaba a punto de comenzar a recuperar también mi libertad física, la que desde hace un año ha sido totalmente restringida. Hoy me había propuesto que le iba a poner fin a ese cautiverio, que iba a salir, que iba a comenzar a moverme nuevamente para recuperar esa libertad también.


Ahora, ¿qué pasa? Como siempre temprano a la mañana miro lo que me ha llegado en la computadora para ver si leerlo, distribuirlo o borrarlo directamente.


¿Con qué me encuentro? Con un artículo largo y extenso, que incluso he impreso, pero que no he reenviado, que se llama “Los Chips Financieros”, y ahí mi alma grita que NO, NO y NO. No me voy a dejar poner un chip – cosa que se está considerando hacer a nivel mundial para, leyendo entre líneas, ejercer un control total sobre la humanidad. No me voy a dejar manipular de esa forma. Sé que si esto se impone realmente, a nivel mundial, voy a tener muchos problemas, pero no quiero volver al cautiverio de que me manejen, de que me digan lo que tengo o no tengo que hacer, y que me manipulen. No, la libertad que he ganado no la voy a abandonar.


Otros mensajes que hablan sobre la política, de lo que está pasando, de lo tremendo que se nos avecina – y no estoy hablando de una invasión de ET’s o algo así – a nivel gubernamental mundial, y sinceramente pienso que si recibimos la ayuda de nuestros Hermanos Estelares para mí ello sería una bendición, en fin, noticias para mí tan, tan catastróficas, que ni siquiera me animé a mandarlas ni a evaluarlas. He pedido ayuda de un gran amigo virtual y confío en que él, no sé si pedir que me brinde apoyo o que me diga lo qué hacer.


Yo en este momento lo único que sé es que voy a enfatizar mi libertad. En un mundo así, como el que pintan, no quiero vivir. El no querer vivir esto no significa que me voy a ir por propios medios, tomando medidas drásticas, NO, pero voy a luchar por mi libertad y la libertad de todos nosotros. Voy a luchar para defender mi libertad de espíritu, mi libertad física y todo lo que ello para mí representa.


Yo sé, estoy llevando una vida que no se puede comparar con la vida de lo que sería un ser humano normal. Con mis horas de sueño alteradas, acostándome durante el día, para dormir un poco cuando puedo, disfrutando de mis horas nocturnas con la paz y tranquilidad que me rodea, sin que suene el teléfono, el timbre de la calle, etc., en fin, sé perfectamente que no soy una persona que pueda convivir con un montón de gente, porque la convivencia no se puede realizar por mis horarios tan estrafalarios – que realmente no son horarios, porque no tengo una cosa fija, no puedo decir hoy que siempre me acuesto a tal hora, no.


En este momento estoy viviendo mi libertad y permitiéndome hacer lo que mi cuerpo, mi espíritu, mi alma, me piden hacer y por esa libertad yo seguiré luchando.


Sé que a lo mejor es un sueño, pero por otro lado para mí la libertad significa poder aceptar que hay Maestros, que hay seres más allá de nuestro planeta, que están trabajando para ayudarnos. Espero que esto no sea una vaga ilusión, una ‘fata morgana’, espero que eso sea realidad. Yo tengo confianza en ello y con eso sigo adelante defendiendo MI LIBERTAD.

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