25 de septiembre de 2010

LA DESAPARICIÓN DEL UNIVERSO - Gary R. Renard CAPÍTULO 9 – (Parte II)

EXPERIENCIAS CERCANAS A LA VIDA

Gary: Un punto excelente. ¿Lo que estáis haciendo es enseñar al ego a elegir en contra de sí mismo?

Arten: ¡Espléndido! ¡Qué estudiante tan inspirado!

Gary: Creo que lo que habéis dicho sobre las apariciones de símbolos divinos también explica cómo se aparece la Virgen a esa granjera de Georgia y le deja mensajes, sólo que los mensajes suenan como que vinieran de una granjera de Georgia. Es posible que María se le aparezca realmente, pero los mensajes toman una forma que ella puede entender.

Arten: Muy bien. Esa mujer es sincera. Los mensajes, por muy simples que sean, están dirigidos a aquellos que más se pueden beneficiar de ellos.

Gary: ¿Y qué hay de otros casos que no son un tema tan agradable, como ese loco que hizo estallar el edificio federal en Oklahoma City? Me resulta fácil dejarme arrastrar y proyectar mi culpabilidad inconsciente sobre él. Ya hemos dicho que es mi propia locura la que veo fuera, en el mundo. Sigo pensando que será difícil para la gente---como lo es para mí---creer que hemos elegido ver nuestro oculto sistema de pensamiento en este manicomio. Nos estás pidiendo que creamos que, por muy ensañado que parezca el crimen, el criminal sólo es un chivo expiatorio que usamos a nuestra conveniencia para ver nuestra culpabilidad inconsciente como si estuviera fuera de nosotros.

Eso significaría que tendríamos que perdonarle por lo que en realidad no hizo,  si es que hemos de ser libres.

Arten: Sí, el ego te juega malas pasadas muy fácilmente, pero voy a dejarte claros un par de puntos. Cuando llegamos ante  lo que parece ser una tragedia terrible, resulta muy fácil dejarse arrastrar por ella.

Sí, tienes que perdonar, pero en una situación así también tienes que ser consciente de un par de cosas. En primer lugar, elegir reconocer la irrealidad del sueño no significa que no debas ser sensible a las necesidades y sentimientos de las personas que se están viendo envueltas en una pesadilla de ese tipo.

Has vivido la muerte de seres queridos. ¿Cómo te habrías sentido en ese momento si algún necio hubiera venido a ti y hubiera empezado a decirte que todo era una ilusión y que no deberías sentirte mal? Simplemente te enfadaría que tu dolor no estuviera siendo respetado.

No puedes esperar que los familiares de los difuntos hagan otra cosa que lamentarse. Permite siempre los sentimientos y creencias de los demás. A esto nos referíamos cuando dijimos que el Curso no satisfaría las necesidades sociales de la mayoría de la gente durante mucho tiempo. Deja que celebren sus bodas y funerales, sus misas y sus juicios ante las cortes de justicia. Esas cosas son necesarias para la sociedad. El curso no es un rito de transición, es una forma de pensar. En segundo lugar, sería igualmente insípido decir a la gente en un momento así que todo es un guión que han elegido por experiencia. Deja que aprendan la verdad cuando quieran buscarla, no mientras están lamentándose por sus amigos o parientes.

Obviamente,  si aquel terrorista hubiera aprendido a perdonar en lugar de odiar, nada de aquello habría ocurrido. No dejes que nadie te diga que el perdón no es algo práctico a nivel de la forma.

Evidentemente, puede hacer toda la diferencia el mundo. Elegir el verdadero perdón y elegir como Maestro al Espíritu Santo no forma parte del guión del ego; es una decisión que tú tienes que tomar para liberarte del guión del ego.

Gary: Si alguien quisiera que el Curso se leyera en su boda o en su funeral, eso debe permitirse, ¿no es así?

Arten: Si eso es lo que desean, absolutamente.

Gary: Se puede tomar cualquier explosión como la de Oklahoma City como un símbolo de la separación, el Big Bang y la aparente destrucción del Cielo.

Arten: Muy cierto, aunque la mayoría de la gente no tiene la preparación necesaria para pensar en ello de ese modo. ¿Alguna otra pregunta?

Gary: Sí. Comencé la formación en este 1978, y ellos me enseñaron esta técnica o fórmula llamada < Sé-Haz-Ten >, que posteriormente a sido copiada por otros maestros espirituales.

Enseñaba cómo ser, y después conseguir lo que uno quiere. Básicamente la idea es que en lugar de intentar o de esforzarte por ser, digamos, un gran músico, debes <ser> un gran músico, hacer las cosas que hace un gran músico y entonces tendrás las cosas que tienen  los grandes músicos. Werner Erhard, el fundador de este, era un gran maestro a pesar de todos sus atacantes, y en aquél momento me ayudó mucho, aunque mi éxito viene y va. Me preguntaba qué pensáis de este tipo de cosas.

Arten: No decimos que no puedas usar tales técnicas, pero, cuando hablamos de abundancia, nos referimos  a un modo de unirte con Dios que hace que te sientas naturalmente inspirado respecto a lo que debes ser, hacer y tener. ¿Por qué no esperas hasta que tengamos esta conversación y ves si responde a tus preguntas con relación al éxito y la abundancia?

Casualmente, una de las cosas que hacen los grandes músicos es practicar mucho y durante mucho tiempo. Dudo que puedas hallar otra forma de hacerlo.

Gary: Tu punto está bien argumentado, pero, aún así, la actitud subyacente de ser un gran músico le ayuda a uno a sentirse mejor.

Arten: Eso es cierto. ¿Algo más?

Gary: Sí, Arten. Pursah me dio un ejemplo de perdón de su última vida que me ayudó tremendamente, pero tú aún no lo has hecho. ¿Qué esperas?  ¿Vas a faltar a tu sagrada obligación hacia mí a riesgo de incurrir en la ira de Dios nuestro Señor?

Arten: No seas juzgón. Aprendí esa palabra en mi última vida. Claro, voy a darte un ejemplo. Pero una de las cosas que quiero que sepas es que cuando llegas a la maestría entiendes completamente esta idea de que el mundo es tu película.

Aunque ya hemos hablado de esto anteriormente, déjame que te pregunte algo; por la noche, cuando estás dormido en la cama y sueñas, o , en tu caso, cuando antes de dormir cierras los ojos, ¿ves imágenes en movimiento y con sonido?

Gary: Sí, y cuando estoy dormido mis sueños me pueden parecer tan reales como vosotros me lo parecéis ahora mismo.

Arten: De acuerdo, la mayoría de la gente no se detiene a pensar y a preguntarse: Con qué veo exactamente estas imágenes del sueño? ¡Tienes los ojos cerrados! Si tienes los ojos cerrados, no puedes estar viendo con los ojos del cuerpo. Éste es un punto importante.

Gary: De acuerdo, concedido. Debo estar viendo con mi mente.

Arten: Sí, ya habías tenido sensaciones de esto antes, en tu vida de vigilia, y dijiste que te había dado miedo. Lo cierto es que  cuando pareces estar despierto durante el día y tienes los ojos abiertos, en realidad no estás viendo con los ojos del cuerpo, del mismo modo que no ves con ellos cuando estás dormido por la noche. Siempre es tu mente la que ve. Siempre es tu mente la que oye y siente y hace las demás cosas que atribuyes a tus sentidos corporales. En esto no hay excepciones. El cuerpo mismo sólo es parte de tu proyección.

A medida que alcanzas la maestría, te vas dando cuenta de que la película que estás viendo es, toda ella, tu proyección; no viene de la mente de nadie más, porque sólo hay una mente. Ésta es la razón por la que todo juicio es una locura. Sí, la proyección que llamas el universo viene de otro nivel diferente y separado  el que experimentas habitualmente. Por eso parece real si dejas que sea real.

A este nivel,  el cuerpo parece tener una experiencia externa al cuerpo mismo, pero lo que parece estar fuera de ti sólo es una macrovisión  proyectada por tu propia mente, y tu experiencia de ella aquí sólo es una microvisión que también está siendo proyectada por tu propia mente. Decir que sólo tu interpretación de ello---tu juicio o tu perdón---hace que sea real o irreal es absolutamente cierto.

Ahora bien, a medida que perfecciones la aplicación del perdón, tu dolor e incomodidad se reducirán, y a veces desaparecerán completamente. Date cuenta de que no he dicho que la causa aparente del dolor y de la incomodidad vaya a desaparecer.

Teóricamente sería posible que un maestro muriera de cáncer, o que fuera asesinado  como J, sin sentir el dolor asociado a tales sucesos. Si el dolor se va, y tu sufrimiento se va con él, ¿importa realmente que la causa ilusoria del dolor siga pareciendo estar ahí?

Gary: Nunca había pensado en eso. El mundo juzgará la situación por la apariencia, pero sería muy posible que un maestro no sufriera a pesar de lo que pareciera estar ocurriendo, e incluso que sintiera despreocupación al respecto. El mundo diría: <Ésa persona murió de cáncer ¡un ser iluminado!. Y sin embargo podría tratarse de una lección de perdón que esa persona hubiera aceptado y llevado a cabo con gran éxito.

Arten: Lo cual es tan sólo una razón más por la que nunca deberías guiarte por las apariencias. Si no hay efecto, o dolor, entonces no hay causa. En realidad no. Lo que parece estar produciendo tu dolor, sea una circunstancia o una relación, o ambos, puede desaparecer o no cuando practiques el perdón.

Parece que el guión del ego no siempre cambia cuando tú lo deseas. Pero es  posible acabar con todo el sufrimiento que exige el guión del ego y sentirse en paz en lugar de sentir miedo. Ése es el guión del Espíritu Santo.

Recuerda, tal como eliges las películas que deseas ver en el cine de tu ciudad, también eliges esta película a la que llamas tu vida, así como cualquier otra película de vida a la que asistas. Y siempre es un caso de autopredeterminación. La película de tu vida ya ha sido filmada, Gary, como esas sesiones de cine matinales que son una ganga. Lo sabes, entonces ¿por qué luchar contra ello? Recuerda, no hemos dicho que no tengas que conservar tus intereses personales. No los tendrías si no fueran parte del guión.

De modo que sí, desarrolla tus habilidades. Comercia en los mercados si quieres, por poner un ejemplo. Usa análisis técnicos. Alégrate cuando detectes una divergencia en los sucesos estocásticos (al azar) aunque sería más inteligente usar un simple método de extrapolar tendencias.

Y mientras estés haciendo esas cosas, recuerda que los ojos del  cuerpo no ven nada, y que en realidad estás viendo tu propia película. A propósito, no importa mucho si te gusta el final o no, porque nunca es un verdadero final, tan sólo un nuevo comienzo hasta que ya no haya necesidad de nuevos comienzos ni finales. Cuando llegue ese momento, sólo quedará la pura alegría, y el aparente opuesto del Cielo desaparecerá.

Algo más que debes recordar es no dejarte distraer por enseñanzas que puedan servir a otros y ayudarlos temporalmente a sentirse mejor, pero  que no forman parte de tu camino elegido. Habrá quienes te digan que cuando tengas un problema (o persona u objeto) que afrontar, puedes decir (yo soy eso) y desaparecerá.

Unificarte con una parte de tu proyección sólo le confiere realidad, y no deshará la culpabilidad en la parte de tu mente que no puedes ver. Sólo el verdadero perdón puede lograr eso.

También habrá quienes te digan que observar y ser consciente de tus emociones te liberará de tus compulsiones. No obstante, aunque has comprobado por ti mismo que observar tus sentimientos ayuda a reducir su impacto, no es  lo mismo que perdonarlos. Sólo el verdadero perdón de tus relaciones, que cura la culpabilidad inconsciente de tu mente, puede liberarte verdaderamente de tus compulsiones o de cualquier otra cosa.

Por último, es posible que los que buscan el equilibrio te hablen de equilibrar cuerpo, mente y espíritu, del equilibrio de las fuerzas duales como el yin y el yang o del equilibrio de <la fuerza>  misma. Equilibrar las ilusiones no es perdonarlas.

Concéntrate en el camino que es para ti. Otros seguirán el mismo camino durante distintas vidas. No olvides que el Curso es algo muy nuevo. ¡El rock and roll sólo tiene 20 años más que el Curso! Siéntete agradecido por haber podido tocar ambos, y da a esa nueva senda espiritual la oportunidad de hallar a aquellos a quienes está dispuesto a llegar.

Nadie sabe cómo perdonar en un principio. Lleva tiempo aprender.

La gente no se da cuenta de lo que le hace a su propia mente cuando juzga y condena a los demás. Incluso nosotros,  que éramos discípulos de J, al principio no lo comprendimos. Claro que en aquel momento pensábamos que sabíamos mucho, a todo el mundo le pasa. Sin embargo, como J dice en el Curso respecto a las enseñanzas plagiarias del Nuevo Testamento, algunas de las cuales se originaron con ciertos discípulos y fueron trasmitidas por ellos: 

Cuando leas las enseñanzas de los Apóstoles, recuerda que les dije que había muchas cosas que ellos no entenderían hasta más tarde porque en aquel entonces no estaban completamente listos para seguirme.

Espero que eso ayude a poner fin al mito de que los discípulos eran maestros ascendidos. Eso nos incluye a Pursah y a mí. Es posible que algunos no quieran saberlo hoy día, pero todos los discípulos tenían al menos 20 vidas más que vivir y más lecciones que aprender antes de alcanzar su iluminación.

Ciertamente aprendimos mucho de J en aquella vida, porque no podíamos dejar de sentirnos impactados por su creencia en el Gran Mandamiento del Dios de Israel: <El Señor nuestro Dios, el Señor es uno, y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con todas tus fuerzas.> J tenía el tipo de humildad que es necesario para decir: <Dios, sólo te quiero a ti>  ¿Cuántas personas pueden decir esto con toda intención?  ¿Estás dispuesto a jugar la última partida?

En mi última vida tenía más de 60 años cuando conocí a Pursah. Fue la última encarnación para ambos. Su marido había fallecido un par de años antes y mi esposa también había hecho su transición. Pursah y yo reconocimos rápidamente que teníamos que estar juntos.

No sólo teníamos en común el Curso y nuestra comprensión personal de él, también sentíamos que nos habíamos conocido en otras vidas. De hecho, fuimos capaces de ayudarnos a recordar muchas cosas de anteriores encarnaciones. En nuestra última vida vivimos juntos pero no nos casamos.

Fue nuestro modo de honrar a  nuestros respectivos esposos, y al mismo tiempo tenernos el uno al otro.

Gary: ¡Pícaro!

Arten: No te daremos detalles personales, ni esperamos que reveles detalles íntimos de tu vida. Hay cosas que es mejor perdonar en privado.  Pursah y yo teníamos aproximadamente la misma edad, y te contaré lo que era diferente en nuestra relación.

Nos queríamos mucho, pero nos liberamos mutuamente al Espíritu Santo. No nos planteamos mutuamente ninguna exigencia ni nos pedimos sacrificios. Tal como el mundo confunde el dolor y el placer, también confunde el sacrificio con el amor. Sin embargo, ¿qué es el sacrificio en última instancia sino una llamada al dolor?  ¿Es eso lo que realmente deseas para tus seres queridos?

Tus amores especiales sólo son ídolos en los que tratas de conseguir lo que crees que está ausente en ti mismo. El romance es un vano intento de llenar un vacío imaginario, un hueco que en realidad no existe, pero que en tu experiencia es una consecuencia de la separación. Esa sensación de carencia en realidad sólo puede ser sanada por la Expiación y la salvación, que te llevarán a la totalidad de tu unicidad con Dios.

Pursah y yo tuvimos la suerte de haber aprendido esto antes de conocernos. No nos exigíamos esas satisfacciones negociadas el amor especial. Nos dejábamos mutuamente ser como éramos, y éramos libres de amarnos sin exigencias, como una expresión de nuestra unicidad como Cristo y con Dios.

Pursah se iluminó antes que yo. Llevábamos unos 8 años juntos cuando supimos que había ocurrido. No hay explicación que haga justicia a su experiencia; simplemente lo supimos. No me preocupaba el hecho de que ella estaba un poco por delante de mí porque sabía que estábamos en el mismo camino y en un nivel muy parecido. La década siguiente fue maravillosa.

Gary: Eso es genial, pero ¿cuál es la lección de perdón que has dicho que me contarías? Espera un segundo, te mostraré paciencia infinita y tal vez tú me des resultados inmediatos.

Arten: Bien. En realidad es muy simple. No siempre se trata de alta ciencia Gary. Lo que ocurrió es que Pursah dejó su cuerpo.

Ella hizo su transición sin mí, y yo me quedé aparentemente solo para vivir los últimos días de mi vida sin ella. Ésa fue una gran lección de perdón para mí, la última que necesitaba antes de alcanzar mi propia iluminación. Después de un par de años recordé Quién era y recuperé completamente mi recuerdo de Dios.

Esa última lección me ayudó a aprender de una vez por toda la insignificancia del cuerpo. Pursah cayó enferma un par de días antes de que su cuerpo se detuviera, pero me explicó que no importa si tu cuerpo tiene salud o no. Éste no es lo que tú eres.

¿Cómo podría importar a menos que fuera tú? La salud y la enfermedad son también dos lados de la misma moneda ilusoria. Ninguno de los dos es verdad, y Pursah lo sabía. Ella sabía que su cuerpo estaba muriendo, pero en lugar de dejar que su ego se disparase alocadamente, estaba rodeada de paz. Parte de mi trabajo fue comprender que el hecho de que hubiera renunciado a su cuerpo no significaba que no estuviera conmigo. Sentía que estaba conmigo, y fui muy consciente de su presencia en numerosas ocasiones a lo largo de aquellos últimos años. Pensaba en algo que ella solía decirme: <No seas tan juzgón>, y era como si estuviera allí. Perdoné al mundo, aunque pensaba que ya lo había hecho, y pronto fui capaz de dejar  mi cuerpo y hacerme uno con Pursah, con Cristo y con Dios.

No podría haber llegado a ese punto sin muchos años de práctica del verdadero perdón. De modo que te doy este pequeño y humilde consejo en lo tocante a todas tus relaciones en este mundo,  tanto si se basan en el amor especial como en el odio especial. ¿Por qué no dejas de preocuparte de si otros te quieren o no y simplemente los quieres tú a ellos? Entonces no importará lo que piensen de ti. Basta con ser amor. ¡Es tan simple! Y, adivina que acaba ocurriendo....! Eso acaba por determinar cómo te sientes contigo mismo!

Gary: No sé si voy a poder hacerlo. Creo que temo la alegría. ¿Puedes darme un resumen rápido de la actitud correcta en la práctica del verdadero perdón, tal como hizo Pursah?

Arten: Claro. Todo está tomado del Curso; incluso puedes encontrarlo resumido en la Introducción. El estudio continuo y la aplicación diligente te dan una comprensión avanzada y lo hacen real para ti. Lo que voy a decirte es muy coherente con el proceso de pensamiento del perdón que Pursah te dio hace 16  meses.

Si yo he fabricado este mundo, eso significa que ahí fuera no hay nadie. He sido yo quien ha hecho aparecer a toda esa gente que veo y considero  la causa del problema. Nada irreal existe, ¿recuerdas? Pude comprender que no hay nada que temer y después negué que cualquier cosa que no fuese Dios pudiera afectarme. Pude perdonar a mis hermanos y hermanas, y a mí mismo simultáneamente. Entonces experimenté progresivamente que mi casa estaba construida sobre la roca. Como estoy seguro de que recuerdas, nada real puede ser amenazado. Todas las ideas encajan entre sí y conducen a la paz de Dios.

Gary: Una vez más, es simple pero no fácil. ¡Especialmente cuando todo se te va al diablo!

Arten: Cuanto más lo hagas, más empezarás a ver a lo que se te había ido al diablo como una oportunidad. Lo estás entendiendo; tu persistencia es muy interesante. Sigue así.

Gary: Entiendo. Pienso que es estupendo que Pursah y tú os conocierais como Tomás y Tadeo, y que también pasaseis junto la parte final de vuestra última vida, Eso es muy interesante.

Arten: Oh, hay cosas muy interesantes que descubrir, Gary, como podrás comprobar por ti mismo.

Pursah: Bien, ya es hora de emprender este viaje, hablando metafóricamente por supuesto. No es accidental que durante algunos años te hayamos visitado en esta fecha. Este día que está relacionado conmigo cuando era Santo Tomás---algo que te dejaré averiguar algún día si puedes---nos da la oportunidad de tener un pequeño encuentro contigo antes de vacaciones y animarte a aprovechar tus lecciones de perdón el año que viene.

Nota: Más adelante supe que el 21 de diciembre es la fiesta religiosa de Santo Tomás, aunque se celebra el 3 de julio en la iglesia siria, donde Tomás sigue siendo venerado.

Nos gustaría que a estas alturas el año te reunieras mentalmente con la gente de todo el mundo. No importa que festividad celebren, ni si admiran a J o a Judas Macabeo.

Gary: ¿A quién?

Pursah: Consúltalo, pero es posible que tengas que investigarlo bajo Hanukkah. Así también aprenderás algo sobre esa fiesta.

Gary: Acabo de averiguar algo sobre la fiesta de Kwanzaa, de modo que podría convertirlo en un festival internacional.

Pursah: Todo el mundo celebra esta época del año. Si pudieran llevar su paz al nuevo año, eso marcaría la verdadera diferencia. Navidad, Hanukkak, Kwanzaa, Ramadám, Gita Jayanthi.... todos ellos son símbolos del reconocimiento de algo más allá del ámbito individual.

Gary: ¿Gita Jayanthi es la celebración del Bhagavad-Gita?

Pursah: Sí.

Gary: ¿Y que hay del festival pagano de WICA llamado Yule?

Arten: Los paganos no cuentan. ¡Es broma! Ésta es una gran época del año para todos. Como sabes la Iglesia tomó la fecha de Navidad de un festival pagano. Es interesante observar lo que hace la gente cuando creen que están en medio de una competencia.

Gary: ¿Quieres decir que J no nació en un pesebre un 25 de diciembre?

Pursah: Para continuar, éste es un tiempo de paz y renovación. Como el Curso te enseña:

En tus manos está hacer que esta época del año sea santa, pues en tus manos está hacer que la época de Cristo tenga lugar ahora. Es posible hacer esto de inmediato; pues lo único que ello requiere es un cambio de percepción, ya que únicamente cometiste un error.

Tu hogar se encuentra allí donde está el corazón, Gary. Si tu corazón se halla en Dios, entonces ya estás en casa. Renuncia al mundo, no física, sino mentalmente.

Ese mundo en el que pareces vivir no es tu hogar. Y en algún recodo de tu mente sabes que esto es verdad.

Esa actitud hará que te sea 10 veces más fácil perdonar. La próxima vez que se te vayan las cosas al diablo, amigo mío, recuerda a Dios y perdona; porque, si perdonas, entonces recordarás a Dios.

Dios ama a su Hijo. Pídele ahora que te proporcione los medios a través de los cuales este mundo desaparece, y primero vendrá la visión, y un instante después, vendrá el conocimiento.

Perdona tu mundo. Libera cada ilusión equitativamente, pues todas son igualmente falsas. Como J te aconseja en su Curso:

Haz que este año sea diferente al hacer que todo sea lo mismo.

Arten: Amor y perdón; eso es de lo que siempre trataba J. Felices vacaciones, Gary. Perdona a tus hermanos y hermanas, porque vosotros sois uno, y así retornaréis a ser completos nuevamente.

...Ahora ha sido redimido. Y al ver las puertas del Cielo abierta ante él, entrará y desaparecerá en el Corazón de Dios.

1 comentario:

darYrecibir dijo...

Amo las referencias a Un Curso de Milagros!